Los laboratorios se enfrentan al reto de combinar la investigación y el análisis con un consumo energético lo más reducido posible, a la par que se hace un uso responsable de los recursos. Procesos como la simulación ambiental y la refrigeración consumen mucha energía y repercuten tanto en el medio ambiente como en los costes operativos. BINDER demuestra cómo es posible ahorrar energía mejorar la sostenibilidad en el laboratorio aplicando medidas bien pensadas.
Dispositivos que protegen los recursos
Las cámaras climáticas y las incubadoras se desarrollan siguiendo principios de diseño ecológico, de manera que protejan los recursos en la medida de lo posible, sean duraderas y se reciclen bien a lo largo de toda su vida útil. Esto incluye un aislamiento de espuma de alta calidad para reducir el consumo energético, interiores de acero inoxidable reciclable y carcasas de chapa de acero galvanizado con un revestimiento sin disolventes y de bajas emisiones, de conformidad con las normas ISO 14001 e ISO 50001.
Refrigerantes naturales y refrigeración eficiente
En las nuevas cámaras climáticas, BINDER utiliza exclusivamente refrigerantes naturales como CO2, isobutano o propano, renunciando al uso de refrigerantes fluorados de bajo potencial de calentamiento global. En combinación con los refrigerantes naturales, los modernos compresores convertidores trabajan de una forma muy eficiente con la energía, ahorrando energía adicional a lo largo de la vida útil de los equipos. Las cámaras climáticas de la serie ECO trabajan con tecnología Peltier, enfrían termoeléctricamente y no necesitan ningún refrigerante.
La eficiencia energética de los dispositivos es el centro de atención, ya que impacta de manera directa en las emisiones y los costes operativos. Así, las cámaras de clima constante de la serie KBF PRO consumen más de un 40 % menos energía que los modelos predecesores gracias a la tecnología de refrigeración por inversor. Sus ventajas se hacen patentes, sobre todo, en el funcionamiento continuo: bajo consumo eléctrico, menos calor residual y larga vida útil de los componentes.
Vida útil prolongado y economía circular
La estructura modular de las cámaras climáticas de BINDER y una garantía de recambios permiten reparaciones sin tener que sustituir sistemas completos, lo que prolonga la vida útil, evita residuos y ahorra recursos. Además, se emplean materiales que pueden reciclarse o reutilizarse al final de su vida útil. El acero inoxidable y chapa de acero galvanizado, por ejemplo, pueden reciclarse casi por completo en el ciclo de materiales.
Neutralidad climática hasta 2045
BINDER tiene el objetivo de fabricar con neutralidad de CO2 hasta 2030 y conseguir la neutralidad climática íntegra hasta 2045. Este objetivo se ve respaldado por una gestión medioambiental y energética certificada, la generación de energía mediante una instalación fotovoltaica propia y la recuperación del calor residual de las máquinas, así como por procesos digitales y respetuosos con los recursos. La optimización continua de los procesos ha permitido a BINDER reducir considerablemente las emisiones de CO2 en el año 2024, más de un 40 % en comparación con la media de 2019 a 2021.
Los laboratorios aprovechan en la práctica la estrategia de sostenibilidad: los equipos energéticamente eficientes y duraderos ayudan a conseguir los objetivos medioambientales y los requisitos regulatorios, así como a reducir los costes operativos.